(IES “Miguel Servet” – Zaragoza) Nunca hubiéramos pensado que la salud, cuidarnos y estar bien podía ser tan importante, nunca habíamos vivido tan pendientes del momento, nunca hemos sentido tanta necesidad de contacto y afecto o estado tan atentos a una silla vacía en la clase, a cómo nos sentimos, a como están los nuestros, nuestra familia y nuestros compañeros.
Hemos tenido que adaptarnos, modificar nuestras rutinas con salidas y entradas diferenciadas, prescindir de zonas comunes como biblioteca, cafetería, aulas de música y plástica para habilitar aulas y poder distribuir al alumnado. También, hemos adaptado nuestro recreo en zonas separadas y suspendido los intercambios y otras actividades durante gran parte del curso. Sin embargo, esto nos ha traído otras realidades y ha brindado nuevas oportunidades como saborear los beneficios de clases menos numerosas, trabajar en el aula con profesorado de apoyo que ha facilitado la labor en el aula, aprender a comunicarnos y estar más conectados como centro con una plataforma virtual común, a manejarnos en aulas virtuales además de físicas, a modificar el modo de enseñar y aprender en la semi-presencialidad, a agilizar algunos procesos a través de las reuniones virtuales, a buscar formas diferentes de hacer las cosas, a valorar lo que tenemos y el poder ir a clase. (leer más)